Ridley Scott tiene el inicio de carrera como director más espectacular a mi entender, quizás solo Orson Welles podría reclamar ese sitio. Con Los duelistas, Alien y sobre todo Blade Runner, este cineasta inglés proveniente de la publicidad, irrumpe con una carrera que prometía ser única. Sin embargo, sus siguientes proyectos fueron muy discutibles, de ellos apenas se pueden rescatar algunas cintas como Thelma and Louise, Gladiador y La caída del Halcón negro. Tiene dos auténticos fracasos con La teniente O¨neil con una Demi Moore en el colmo del feminismo y sobre todo Hannibal, tan mala como el libro mismo.
Sin embargo con su más reciente cinta; American Gangster, recupera buena parte de sus virtudes. Apoyado con un excelente guión de Steve Zaillian, que entre otros guiones tiene La lista de Schindler, La caída del halcón negro, Pandillas de Nueva York y Buscando a Bobby Fisher, esta última como director también, Scott realiza su mejor cinta en varios años con la colaboración de un Denzel Washington tan bien como siempre. Russell Crowe no tiene oportunidad de lucirse ahora, pero lleva su personaje con esa muestra de pureza y dolor de los detectives clásicos. Evitando sus acostumbrados ambientes de lluvia, luces neón e interiores suaves, Scott construye paso a paso el ascenso del chofer de un mafioso de Harlem a ser el Ganster americano por encima de italianos e irlandeses. A la vez toca aspectos de la guerra de Vietnam y la manera en que se introducía la heroína a territorio americano. Es de particular ironía una imagen real de Richard Nixon donde advierte que el enemigo más grande de los Estados Unidos es la droga que se consume y distribuye en su territorio. La globalización de la distribución la iniciaron ellos a traves de esta guerra y hoy en día enfrentan este problema culpando y combatiendo en otros países lo que deben hacer en su territorio.
Valiendose de una fotografía contrastada y de una edición que nos muestra de manera alterna el ascenso del gangster y las acciones policiales, Scott nos lleva de manera firme a conocer ambos personajes que se unirán al final de sus carreras de una manera singular. Esperemos que Ridley Scott se convierta en un autor cinematográfico y no en un destajista de películas de género.
La cinta ha quedado fuera de las nominaciones del Oscar, tan solo tiene una por actriz secundaria, pero que podemos esperar de esta academia envejecida, que también dejó afuera a Zodiac de David Fincher. Ya no digamos a la cinta rumana 4 meses, 3 semanas y 2 días que tampoco alcanzó nominación a cinta extranjera.
Scott va a la deriva, por eso no he corrido a ver esta película, que con tus palabras me apetece más ver ahora, fiado de tu buen criterio. Ah, y has dejado en tu texto una frase para enmarcar: "Russell Crowe no tiene oportunidad de lucirse ahora, pero lleva su personaje con esa muestra de pureza y dolor de los detectives clásicos". Qué bien dicho, José.
ResponderEliminarUno aprende a desconfiar de ciertos directores que no dejan una obra sólida. pero esta cinta muestra algo del viejo Scott. Gracias por el comentario. Saludos
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