Aquellos que son lectores compulsivos, seguramente han pasado por la experiencia de leer dos o más libros a la vez. Por ello, quizás no resulte tan extraño mi experiencia actual. Caigo en cuenta que varios libros pasan por mis manos en estas fechas. A saber; en la sala se encuentra el inmenso y extenso Juegos sagrados de Vikram Chandra, mismo que ya voy por la página 700 de las 1,000 que tiene. Su peso y tamaño hacen que la sala sea su lugar adecuado para sentarme cómodamente y sostenerlo entre mis manos y piernas. A estas alturas mantiene perfectamente su interés. A un lado de la cama tengo ahora Breve tratado de la pasión, selección de textos de Alberto Manguel. Es una colección de cartas de personajes famosos en donde expresan la pasión amorosa. Duermo y sueño de lo lindo. En mi estudio ahora me deleito con la prosa elegante de Michel Tourier con El árbol y el camino, ensayos breves de temas diversos; un acuario, novios en una playa, llaves y cerraduras, ciudades, imagen erótica, etc. todos muy interesantes desde el punto de vista de este autor. Muy recomendable. Y en el automóvil llevo En la Patagonia, de Bruce Chatwain, todo un clásico de la literatura de viajes. En ocasiones cuando estamos hartos de algo, decimos, "me voy a ir a la Patagonia" !!! Tal vez por ello la llevo en al auto. La verdad es una exageración tantos libros, pero así me encuentro por estos días.
Y ahora busco un lugar donde instalar Echo Park, de Michael Connelly, por ahora mi escritor preferido en novela negra, pero solo quedan el baño y el cuarto de invitados... Quizás deje unas noches la pasión amorosa de mi habitación y me cambie a la emoción policiaca en el cuarto contiguo, aunque duerma menos.
Lecturas itinerantes... Lecturas amontonadas... Lecturas interrumpidas... Desorden total. Y ni siquiero tengo un sitio específico para cada libro... Un poco caótico, pero bueno, ahí vamos.
ResponderEliminarEstoy deseando ver el corto.
Un saludo.