Dicen en los talleres literarios que hay que escribir todos los días, incluso los grandes escritores nos revelan los secretos de su escritura diaria como una disciplina. Pero en ningún lado dicen que hacer cuando uno no quiere o no puede escribir.
Quienes se han asomado a este espacio en los días anteriores notarán que no hay nuevas entradas. Hasta ahora. Bueno, solo para decir que no hay nueva entrada.
Quizas esto de ver pasar la vida se queda en mis manos y no me obedecen. ¿Qué hacer? ¿Esperar a que llegue la musa? ¿La inspiración?
O será que el inmenso libro de 1,000 páginas me tiene chupado el cerebro. Apenas voy por la 380 y quizás me agobia lo que falta. En realidad conforme avanzo en la trama se pone más interesante. ¿Será que soy lector y el aprendiz de escritor colgó sus manos?
Se aceptan sugerencias, remedios, consejos o cualquier brebaje que devuelva la obediencia a mis manos sobre el teclado.
Vaya..., ya somos dos. Hay días que estoy más espesa que una crema de calabacín y mira, a mí me agobia no tener tiempo de leer, llevo una racha que pa mi solica se queda, pero confio que las musas venga a mi casa como que vuelvan a la tuya y mientras, disfruta de ese libro que luego nos tienes que decir si merece la pena. y pa mi pido un ratico de lectura tambien.
ResponderEliminarBesicos
Un poco de filosofía … ¿Quién tiene la verdad absoluta? … La energía del Alma se mueve: por sensibilidad virtuosa, por afinidad energética, por sentir alegría de hacerlo y porque es el tiempo de esa realización. Ya llegara el momento en que sientas ese deseo de escribir, mientras tanto disfruta tu libro que es lo que el alma te pide hoy.
ResponderEliminarSaludos
Nani: por lo pronto sigo tu consejo y me ocupo del libro. Lo otro llegará por si solo. Saludos
ResponderEliminarHola Desirée; escribir o no escribir, ese es el dilema, mientras tanto, tienes razón, disfrutar la lectura y esperar el momento para lo otro.
ResponderEliminarSaludos
Yo creo que los bloqueos suelen aparecer como consecuencia de una acumulación de tareas. La solución está en evitar agobiarse, relajarse y emprender una cosa detrás de la otra. Al final, todo vuelve a su cauce. A mí me funciona.
ResponderEliminarYo tengo el problema de dejarlo todo para última hora. Cuando tengo tiempo por delante, suelo remolonear. Pero cuando llega el momento de ir con la lengua fuera, entonces es cuando me activo.
Los bloqueos son algo normal. Paciencia.
un abrazo y que se pase pronto.
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ResponderEliminarTienes razón Miguel; otras tareas necesitan de mi atención por el momento. La verdad, no me preocupo, siempre encuentro el camino de regreso. Gracias.
ResponderEliminarIsla o SIRENA?
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